SEMANA 21

A las 21 semanas de embarazo, su bebé podría comenzar a dejar su marca, es decir, en forma de estrías, en todo el abdomen, las pompis, los muslos, las caderas y los senos. Estas rayas rosadas, rojas, moradas, marrón rojizas o marrón oscuro aparecen a medida que su cuerpo se expande y su barriga y sus senos siguen creciendo: el tejido de soporte debajo de la piel se rasga a medida que la piel se estira.

Las estimaciones varían, pero al menos 1 de cada 2 mujeres las obtienen, aunque es una candidata probable si su madre tuvo estrías durante su embarazo. El aumento rápido de peso también puede predisponerla a tener estrías, otra buena razón para aumentar su peso de forma lenta y constante, en un promedio de aproximadamente una 450 gramos por semana en estos días.

Dependiendo de su complexión y los genes que heredó, estas líneas aparecen primero como rayas rojas, rosadas o marrones, y con el tiempo, eventualmente se desvanecerán.

Desafortunadamente, no hay una forma comprobada de evitar que las estrías se extiendan en zigzag a través de su cuerpo (aunque no es perjudicial aplicar humectantes como la crema de cacao; así evitará la sequedad y la comezón asociadas con la piel estirada durante el embarazo).

¿Hay alguna buena noticia? No se quedarán tan vívidamente para siempre. Después del parto, generalmente se desvanecen a un tono menos notable.

Ahora que está empezando a parecer embarazada, y esas patadas ya no pueden confundirse con gases, la realidad del embarazo probablemente está comenzando a percibirse. Con él, puedes encontrar algunos sentimientos ambivalentes o incluso ansiedad que incluso son ambivalentes de admitir: ¿yo, mamá? ¡Debe haber algún error! No te preocupes, y espera.

En algún momento del embarazo, y generalmente una vez que el embarazo se convierte en una realidad muy visible, casi todas las futuras madres y padres comienzan a sentir ansiedad y miedo, casi como si estuvieras en un tren fugitivo y hay enormes cambios.

Y no solo es completamente normal sentirse ansiosa, es especialmente saludable reconocerlo. Hable sobre sus sentimientos con sus amigos que han tenido bebés; le asegurarán que experimentaron el mismo tipo de pensamientos. Lo más importante, discuta sus miedos con su pareja, que probablemente necesita un buen corazón.

¿En riesgo de parto prematuro? ¿Como saberlo? Si tiene antecedente de parto prematuro, si tiene infecciones vaginales y urinarias recurrentes, si le han realizado conización del cuello de su útero o tiene un embarazo gemelar; su médico puede proponerle hacer un examen por vía vaginal denominado cervicometría, que consiste en la medición de la longitud cervical (cuello de su útero).

Medir el cuello de tu útero únicamente se realiza a través de un ultrasonido por la vagina, no tengas miedo, es inocuo y no conlleva ningún tipo de riesgo ni para ti, ni para tu feto.

Esta medición, en investigaciones importantes, ha demostrado predicción hasta de un 60% de los casos, siempre y cuando se lleve a cabo entre las 16 a 24 semanas. 

Si los resultados son negativos, es decir, si su longitud cervical es mayor de 25 mm, entonces su riesgo es bajo, pero si son positivos, es decir, si su longitud cervical es menor de 25 mm, sus probabilidades de comenzar el trabajo de parto demasiado pronto son mucho más altas, por lo que su médico puede tomar medidas para prolongar su embarazo y preparar los pulmones de su bebé para un parto temprano.

El énfasis está en «inútil»: aún quiere comer suficientes calorías adecuadas para mantener a su bebé alimentado y creciendo. Después de todo, la idea no es perder peso, perder peso siempre es una mala idea durante el embarazo, sino reducir la velocidad a la que está aumentando.

Las estrategias fáciles, nutritivas y reductoras de calorías, como sustituir la fruta fresca por frutas secas, papas horneadas o batatas en lugar de papas fritas y pollo a la parrilla sin piel por carne oscura frita con piel, pueden hacer una gran diferencia.

¿Cuánto peso es demasiado? Todo depende, es probable que su médico le haya aconsejado sobre su aumento de peso objetivo en su primera cita prenatal, y que se calculó en función de una serie de factores, incluido qué tan cerca era su peso ideal antes del embarazo.

Es probable que su médico también le hable en cada visita sobre dónde se encuentra en esa curva ascendente y hacia dónde debe apuntar. Si se le ha indicado que gane el total estándar de 11 a 15 kg en su embarazo, para esta semana es probable que haya ganado entre 4.5 y 7 de esos kilos.

Si pasó ese número hace semanas o está ganando más rápido de lo recomendado por su profesional, querrá reducir la velocidad.

Sus piernas, axilas, línea del bikini y labio superior pueden ser más peludos de lo normal debido a todas esas hormonas. Pero piense dos veces antes de recurrir al láser, la electrólisis, los depilatorios y el blanqueamiento.

No se han realizado estudios confiables para determinar con certeza si estos tratamientos populares de depilación y aclarado son dañinos o no, pero probablemente sea mejor omitirlos hasta después de dar a luz.

Sin embargo, anímate, puedes afeitarte. Incluso la depilación está bien si tu piel no es demasiado sensible. ¿Eso no te hace sentir mejor? ¡Anímate – estás a más de la mitad para llegar al parto!

¿Está su intestino enlentecido? Entonces comienza a ejercitarte. Tanto durante el embarazo como en las primeras semanas posparto, la actividad física es una de las mejores formas de estimular los intestinos y combatir el estreñimiento.

Incluso una caminata de media hora al día puede hacer el truco, especialmente si bebe mucha agua y favorece los alimentos ricos en fibra.